Los cuchillos de Damasco o los cuchillos hechos de acero de Damasco se consideran legítimamente uno de los mejores. De hecho, este no es un grado de acero, sino un método de procesamiento cuando muchas capas de diferentes aceros se sueldan o forjan juntas.
Los cuchillos japoneses de Damasco combinan métodos antiguos de armeros y tecnologías modernas. Como regla general, los herreros alternan aceros con alto y bajo contenido de carbono. Los aceros con un alto contenido de carbono tienen nitidez, y los que tienen un bajo contenido de carbono tienen resistencia. Ambas propiedades se combinan en la hoja de Damasco. A partir de la alternancia de aceros, se obtiene una hoja fuerte, duradera y afilada de varias capas con un hermoso patrón. El acero de Damasco recibió su nombre de la ciudad siria de Damasco, que durante mucho tiempo fue el centro de la metalurgia y la producción de cuchillas. Sin embargo, las excavaciones arqueológicas muestran que desde la antigüedad, en diferentes partes del mundo, los herreros han dominado la técnica de hacer cuchillas multicapa, que hoy en día se llaman cuchillas de Damasco en todo el mundo.
Muchos cuchillos japoneses de Damasco fabricados en fábrica suelen tener un diseño de tres capas. El filo está hecho de acero al carbono sólido (por ejemplo, aogami) y las placas blandas están hechas de acero de Damasco. Esto se hace no solo por la belleza. Las almohadillas más suaves evitan que el cuchillo se rompa. De acuerdo con sus propiedades, tales cuchillos no son completamente inferiores a las hojas de Damasco. Hay varios tipos de Damasco. Los más comunes son: "salvaje" y "simple". Los nombres hablan por sí solos. Un paquete de aceros se forja, se dobla y se forja de nuevo. Esto se repite muchas veces. El dibujo de tal acero de Damasco resulta caótico, por lo que se llama salvaje. A diferencia de estas especies, el damasco mosaico tiene un patrón estricto. Para dicho acero de damasco, se selecciona específicamente un paquete de aceros como mosaico.
A pesar de que los cuchillos de acero de Damasco son realmente muy afilados y duraderos, no se pueden usar para cortar alimentos excesivamente duros o picar huesos. Hay herramientas especiales para esto, por ejemplo, hachas de cocina. Dado que Damasco generalmente contiene acero al carbono, tales cuchillos son susceptibles a la corrosión. Después de su uso, los cuchillos japoneses de Damasco deben lavarse y secarse inmediatamente. Para el cuidado, recomendamos usar aceite de camelia. El aceite llena bolsas de aire invisibles y el cuchillo no se oxida. Como regla general, los cuchillos de Damasco se afilan durante mucho tiempo. Para mantener el filo afilado, afile el cuchillo con un palo de cerámica. Se recomienda utilizar piedras de afilar para el afilado principal.
Un cuchillo de Damasco japonés será una maravillosa herramienta de trabajo de un cocinero, un adorno de cualquier cocina, así como un regalo digno.